Las dos caras de Moyano

¿Quién es el bueno y quién el malo en esta disputa de poder que afecta más directamente a todos los argentinos, como siempre sucede? ¿Moyano es el bueno o el malo de esta película repetida?

- Hasta allá te voy a mandar de una patada
si volvés a dejarme sin nafta.

Con el paro de transportes los Moyano volvieron a mostrar el peso de su gremio Camioneros. Y con eso, cómo pueden afectar a todos los argentinos, en todos los aspectos de nuestras intensas vidas. Por un lado. Por el otro, el gobierno que no da el brazo a torcer tanto porque no quiere a un Moyano fortalecido pero tampoco quiere asumir sus errores y quedar expuesto. La señora presidenta no tiene buena relación con el señor de las rutas, pero la realidad es que cuando se necesitaron, se tuvieron. La noche les vino después. Lo real es que ahora, las papas queman.


Queremos dejar claro algunas cosas: no tenemos nada que ver con Moyano, pero nos parece bien su reclamo por ajuste salarial. No tenemos nada que ver con Moyano, pero nos parece correcto su reclamo por actualización del mínimo de ganancias. No tenemos nada con Moyano, pero también nos resulta lógico su reclamo por las asignaciones familiares.


Queremos dejar claro otras cosas: no tenemos nada que ver con el gobierno, pero coincidimos en que no se puede dejar al país entero sin combustibles ni provisiones. No tenemos nada que ver con el gobierno, pero estamos de acuerdo en que no está bien que los jefes sindicalistas sean más poderosos que el mismo presidente. No tenemos que ver con este gobierno, pero no queremos más apretes ni atropellos de ningún tipo por parte de gremialistas. Ni de nadie.

- ¿Métodos extorsivos yoooo?

Con los únicos que tenemos que ver es con la gente que hace años es víctima de las luchas de poder que provocan las irregularidades y fluctuaciones en este país, es decir con nosotros mismos. Son los que pagan, pagamos, todos los platos rotos.
El problema es que desde ambos lugares el patoterismo y la soberbia son bandera y modus operandi. El anterior conflicto de estas características fue el del campo, y superó los 100 días de lucha. En esta ocasión, se vuelve a parar un país, algunos por decisión propia, otros por falta de combustible.


Moyano ilustra la tapa de este número como el personaje Dos Caras que acecha a Batman y a toda Ciudad Gótica justamente porque en este momento el líder de la CGT posee todo el poder para hacer y deshacer lo que se le antoja: amistades, enemistades, cómplices y víctimas. Lo que no puede deshacer en su pelea por quedarse nuevamente con el poder de la CGT es llevarse puesto hasta a él mismo con su constantes idas y venidas. Adaptando una famosa frase de Groucho Marx, éstos son los ideales que posee Moyano, y los va a bancar hasta donde le dé(n) la Nafta.


Cerramos con una canción que es casi un pedido: Cristi, devolvele a Huguito su generosidad.