Un siglo de Titanic: análisis especulativo 2.0

Esta semana se cumplen 100 años del hundimiento del Titanic, el barco que antes de partir en su viaje inaugural fue vendido como el inhundible. Un siglo después, viendo cuanta investigación sobre el caso emerge (cuac) y algunas nuevas hipótesis acerca de si un fenómeno natural produjo un espejismo que impidió ver el iceberg, nosotros pensamos que es una tragedia que bien podría haberse evitado. Por ejemplo, si se hubiera retrasado 100 años más, con un contexto completamente distinto.

En medio de muchos fuegos artificiales, la gente sube fotos mediante sus smartphones a las diferentes redes sociales con leyendas del tipo “Partimos en el inhundible”. La foto oficial del White Star Line  -empresa encargada del Titanic-  del Primer Ministro de Inglaterra David Cameron rompiendo un champagne contra el barco consigue 2222 “me gusta”: la cantidad exacta de pasajeros.

Durante el viaje, FourSquare tiene mucha actividad: los pasajeros se loguean en el Gimnasio, la cafetería, y hay dos celulares de un tal Jack y una Rose que incluso hacen un check-in arriba de un auto en la cochera, aunque todavía nadie entiende qué hacían ahí.

Desde el blog del chef, se pueden ir accediendo a las recetas con unos minutos de anticipación, una actitud bien marketinera ya que el precio del plato no estaba incluido en los pasajes, y con las fotos retocadas con Instagr.am a más de uno le habría el apetito. Un desliz, pero el 13 de abril al mediodía, una de las opciones del menú ejecutivo era Calamares a la Romana sumergidos en vinagre.

Instagr.am va ganando terreno y no por los mil millones que paga Zuckerberg para comprarlo sino porque se empiezan a ver fotos de atardeceres, con mucha gente chapando en la punta del barco.

El Capitán del Barco avisa vía Twitter que adelante hay un iceberg, pero como sucede en todos los trabajos los empleados no siguen a su jefe, nadie se entera y se repite la tragedia. Entretanto, el tweet “Fiesta en Planta Baja”, consigue más de 150 Retweets.

Ahí mismo es cuando YouTube comienza a hacer estragos. Videos del hundimiento comienzan a tener millones de visitas. Es llamativo un caso de un video que es dado de baja por contener de fondo la música de la banda que seguía tocando, por derechos de autor (no estaban adheridos a CreativeCommons).

Intentar comunicarte en estos momentos con alguien vía MSN o WhatsApp es imposible: o todos están como No Conectados o hay mucha desadmisión fácil, por lo cual se vienen un par de horas aburridas.

Hasta último momento en FourSquare la ubicación del capitán seguía siendo arriba del barco. Bueno, ustedes entienden lo de “arriba”.

Ahora, viendo este posible escenario completamente especulativo, sin sentido y bien pesimista nos obligamos a preguntarnos: ¿avanzamos tanto con la tecnología?

La última foto en la que etiquetaron al Capitán del Barco. Garrón.